El agua es un elemento de la naturaleza primordial para el sostenimiento y la reproducción de la vida en el planeta, convirtiéndose en parte fundamental para el desarrollo de los procesos biológicos, de igual manera, es un recurso crucial para la humanidad y para el resto de los seres vivos.
Considerando que el 2,5% del recurso hídrico de la tierra es agua dulce, y que solamente el 0,007% de las aguas dulces se encuentran disponibles para el uso humano directo, es un gran reto para las naciones garantizar una correcta administración de las redes de acueducto, por ende, el control de las pérdidas es de vital importancia, especialmente en países Colombia donde se pierde entre el 40 % y el 80 % del agua que pasa por la planta de tratamiento.
Es por esto, que las empresas prestadoras de servicios tienen el desafío de garantizar la conducción eficiente del recurso, lo que se hace más complejo dadas las condiciones de las redes de acueducto viejas e ineficientes, este problema produce diferentes tipos de pérdidas considerando el agua tratada en las PTAP frente a lo facturado a los suscriptores.
Frente a esto, existen varios tipos de pérdidas en las redes de acueducto y diferentes factores que afectan las redes de distribución de agua, pero principalmente hay tres causas que llevan a que los índices de agua no contabilizada aumenten:
- Los errores de medición que representa entre el 30% y 40% de las pérdidas.
- Las fugas representan entre el 25% y el 35% de las pérdidas.
- Conexiones fraudulentas o clandestinas.
Es por esto, que las empresas prestadoras de servicios deben establecer unos planes para el control de pérdida de agua, donde se debe iniciar por detectar el problema e identificar el porcentaje de pérdidas que tienen en sus sistemas. En el control de pérdidas se debe trabajar enfocado en tres frentes esenciales:
- La medición de las condiciones hidráulicas.
- El control de las redes de acueducto.
- La reducción de pérdidas de los elementos en contacto.
Para esto es esencial garantizar, el uso de elementos acordes a las necesidades y que permitan reducir las afectaciones hidráulicas o fugas.
Desde APOLO, nuestro compromiso es brindar soluciones que nos permitan no solo garantizar el transporte de agua adecuadamente, sino que esto se realice reduciendo las pérdidas de agua y energía en las redes de acueducto. A continuación, mencionamos las acciones que nos permiten aportar a la reducción de pérdidas.
Medición de condiciones hidráulicas:
Para comenzar con el análisis del problema, lo primero es medir las condiciones hidráulicas de nuestra red y sectorizarla, con el fin de reducir los riesgos de falla, logrando así cerrar las diferentes zonas hidráulicas y poder plantear planes de intervención que permitan reducir las pérdidas, es por esto, que es de suma importancia lo enunciado en la resolución 0330 del 2017 en el artículo 64, donde se establece que debe instalarse una válvula de cierre en todas las conexiones de los sectores hidráulicos, además, cuando en un punto dado de la red se interconecten tres o más tramos de la tubería, el diseño debe tener una válvula de cierre en cada tramo.
Como una solución para esta interconexión y la disminución de las pérdidas de agua, en APOLO diseñamos nuestros productos bajo los más estrictos controles de calidad e ingeniería, creando así sistemas híbridos, los cuales además de cumplir con todas las normas del producto, reducen las pérdidas ocasionadas por la disminución del número de piezas requeridos.
Control de las redes de acueducto:
Para dar una solución a los desafíos en cuanto a control de las redes de acueducto, APOLO ha ampliado su línea de productos incluyendo la representación comercial de CLA-VAL, la principal empresa en el mundo de válvulas de control. Esta compañía cuenta con herramientas hidráulicas para el control de los fenómenos que ocurren en nuestras redes como son: altibajos de presión, caudal, golpe de ariete, pérdidas de agua en los tanques de almacenamiento, entre otros.
En las redes de acueducto que no cuentan con un sistema de control de presión, en los momentos de mínimo consumo, la presión tiende a aumentar, generando que cuando se presentan puntos de fuga se incrementa la pérdida de agua y la tasa de daños ocasionados es mayor.
Cuando la presión de operación normal es reducida en los períodos de baja demanda, los puntos de fuga disminuyen, permitiendo así una tasa menor de pérdidas. Un perfil de presión deseado, con presión reducida en el sistema durante períodos de baja demanda. Esto se muestra con una línea sólida en la gráfica. Con flujos bajos, una presión mínima es mantenida, al aumentar el flujo, la presión de salida incrementa gradualmente hasta alcanzar la presión máxima de ajuste para un máximo flujo. El aumento es ajustado finamente en la válvula de acuerdo con los requerimientos del sistema.
La zona de ahorro de agua, por debajo de la línea de presión máxima en la tubería, representa la efectividad de la válvula en reducción de pérdidas de agua y roturas de tuberías. Los ajustes del sistema piloto permiten cambios donde el incremento de presión comienza y finaliza en la ejecución especificada basada en la demanda del sistema.
La premisa de la correcta administración de presión se puede determinar por los siguientes factores:
- Períodos de picos altos, la noche es el tiempo ideal para reducir presión, ya que la reducción de la demanda permite a la tubería presurizarse en exceso, lo que incrementa la posibilidad de fugas y roturas de tubería.
- Hasta una pequeña reducción en la presión puede disminuir significativamente las roturas de tubería y fugas.
- La reducción de la presión baja los costos de bombeo y ahorra energía.
- Las válvulas de control de administración de presión con hidráulica estándar, avanzada o electrónica, puede ayudar a alcanzar objetivos operacionales, sin generar impactos en la capacidad de suministrar presión adecuada, hasta en períodos de extrema demanda, tales como flujo de incendio.
Las válvulas serie 300 CLA-VAL son ideales para la administración de presión y pueden también ser integradas fácilmente al sistema SCADA y programadas para entregar presión mínima nocturna y óptima en el día, ayudando a reducir el riesgo de rotura de tubería y minimizar las fugas. Las válvulas reductoras de presión CLA-VAL actuadas electrónicamente como es la serie 300, combinan el control preciso de los pilotos hidráulicos verificados en campo y la funcionalidad del control remoto de los actuadores electrónicos serie 34. Diseñado y fabricado por CLA-VAL, el actuador sumergible serie 34 mantiene presión constante en el sistema o rangos de flujo con un punto de calibración que puede ser cambiado remotamente.
La reducción de pérdidas de los elementos en contacto:
Por último, la reducción de pérdidas se genera principalmente por el uso de accesorios inadecuados o conexiones inapropiadas en la tubería. Frente a esto, APOLO ha trabajado en el diseño de sus productos garantizando los diámetros efectivos de cada uno y principalmente, en el proceso de pintura FBE, donde garantizamos los espesores mínimos de pintura, con lo cual, aseguramos mínimo 50 años de vida útil del revestimiento al no permitir la generación de incrustaciones en las superficies que puedan ocasionar pérdidas hidráulicas.
Desde APOLO trabajamos diariamente para construir los productos que hacen parte de los acueductos del presente y futuro, permitiendo de esta manera garantizar el óptimo suministro de agua potable a los hogares y la reducción de pérdidas de agua en las redes de acueducto.
Adicionalmente, contamos con profesionales en las diferentes zonas del país dispuestos a brindar una asesoría oportuna y con líderes de línea disponibles para ofrecer un acompañamiento técnico integral desde el diseño hasta la instalación del proyecto.
¡Encuentra en APOLO un aliado estratégico para la instalación de redes de acueducto!
